El Seprona halla en una localidad pontevedresa un almacén ilegal de cadáveres de animales
Los cadáveres se almacenaban sin autorización ni documentación para acreditar su destrucción de acuerdo con el reglamento comunitario, tal y como comprobaron los miembros de la investigación. Las pistas también llevaron a los agentes al municipio de Salceda de Caselas (Pontevedra), donde localizaron un total de 160 animales muertos en las instalaciones de una empresa relacionada con el mundo animal en el momento en el que iban a ser cargados en un camión.
Los ejemplares se encontraban frescos y en estado de descongelación, sin que los responsables pudiesen acreditar autorización alguna para su almacenamiento. Asimismo, se conservaban de manera irregular cuerpos sin vida de perros, gatos, jabalíes, jinetas y aves de pequeño tamaño.
En conjunto con los servicios veterinarios de la Xunta, el Seprona procedió a la intervención de todos los cuerpos, que fueron transportados hasta una planta ubicada en la provincia de Salamanca para su destrucción.
Así, ahora se trata de averiguar el riesgo para la salud pública y medioambiental que puede haber supuesto la gestión irregular de esa cantidad de cadáveres de animales fuera de los métodos legales para su eliminación.
La normativa denomina «subproductos animales» los cuerpos enteros o partes de ejemplares que no están destinados al consumo humano. Los restos encontrados en ambas localidades se ubican en la categoría 1, que es la que requiere un mayor control en su gestión para impedir que se introduzcan en el mercado para regresar a la cadena alimenticia, puesto que muchos ejemplares pueden haber padecido enfermedades infecciosas o haber estado a tratamiento con medicamentos. La normativa obliga a su destrucción mediante la incineración.
Vía La Voz de Galicia
Foto de caninhas (cc)
As Neves, Pontevedra