Gipuzkoa pondrá en funcionamiento en 2019 "una de las incineradoras más avanzadas del mundo"
El Consorcio de Residuos de Gipuzkoa (GHK) adjudicó ayer la construcción y gestión de la incineradora de Gipuzkoa durante 32 años a la unión temporal de empresas que lidera la compañía Urbaser y que integran también otras cuatro firmas guipuzcoanas. Se trata de la mayor adjudicación pública de todo el Estado español en 2016.
“Se escucharán críticas pero tengo la certeza de que tenemos una de las infraestructuras más modernas, avanzadas y mejores de Europa y del mundo”, zanjó ayer, “contento”, el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano. Él fue el encargado, junto al diputado foral de Medio Ambiente, José Ignacio Asensio, de explicar públicamente las características técnicas del proyecto ganador. La incineradora comenzará a funcionar en verano de 2019.
La UTE de empresas adjudicataria deberá hacerse cargo de una inversión de 217 millones de euros para la construcción y puesta en marcha del centro, con sus plantas de Tratamiento Mecánico Biológico (TMB) y Valorización Energética (PVE). Y en el momento en que el complejo comience a funcionar, previsiblemente en verano de 2019, el contratista recibirá 23,6 millones en concepto de canon anual, lo que arrojará una factura de 768 millones de euros que los guipuzcoanos pagarán por la construcción de la incineradora y la gestión de la fracción resto durante 32 años.
Según precisaron fuentes de GHK, la puesta en marcha del “centro medioambiental de Gipuzkoa reducirá el coste actual de todo el sistema de gestión de residuos del territorio de 37 millones a 32”. Solo el transporte de los residuos a los vertederos cuesta en la actualidad, unos “20 millones al año”, precisaron. La reducción del coste en el sistema será aproximadamente del 14% con respecto al actual.
Las primeras obras de movimientos de tierras para construir este complejo comenzarán, previsiblemente, el próximo mes de enero. El proyecto ganador, dijo Olano, es “el mejor” tanto medioambientalmente como en lo referente a recuperación de la energía. “Supera el nivel de las incineradoras que están en marcha a lo largo y ancho de las capitales europeas”, aseguró.
También es el más barato de los tres proyectos que se presentaron al concurso público realizado por GHK, lo que permitirá ahorrar a Gipuzkoa 64 millones de euros en 32 años con respecto a la siguiente oferta más ventajosa, la de FCC, que pedirá el expediente para analizar si cabe la posibilidad de recurrir el resultado del concurso, que perdió solo por cinco puntos sobre un total de 1.000. Tiene quince días para hacerlo.
“Es un día de satisfacción para el Gobierno. Hemos cumplido la palabra dada, después de año y medio de duro trabajo tras el compromiso adquirido y las propuestas planteadas a la ciudadanía. Hoy -por ayer- damos un paso crucial en la solución integral de un problema. Seguramente estamos ante la comunicación más importante que haremos en toda la legislatura”, llegó a decir Markel Olano.
La adjudicación del denominado Complejo Medioambiental de Gipuzkoa, que se ubicará en el barrio donostiarra de Zubieta, fue aprobada con los votos favorables del 87% de la asamblea de GHK, reunida ayer para aprobar la adjudicación de esta infraestructura.
Asensio recordó que, además de ser un proyecto “estratégico”, “se cumple por completo el PIGRUG (Plan Integral de Gestión de Residuos Urbanos de Gipuzkoa)”. La segunda fase de este complejo prevé la construcción de una planta de valorización de escorias y biometanización.
Tecnología eficiente. La Diputación asegura que la nueva planta se ejecutará con “tecnología de primer nivel, automatización y redundancias que aseguren el servicio”. La incineradora ofrecerá, dijeron, un “gran rendimiento que evitará 94.000 toneladas de CO2 en emisiones al medio ambiente, generando energía para 45.000 hogares.
Rendimiento energético. Otro aspecto destacable de la oferta ganadora, afirmó Asensio, es “el rendimiento energético de la instalación, que supera en un 30% lo solicitado en los pliegos y lo exigido por la normativa europea. En lo que se refiere también al aprovechamiento de los materiales, la planta de TMB garantiza la recuperación de un 7,7%, unas 10.000 toneladas anuales de materiales de fracción resto tratada, cuando el pliego exigía un 5%.
PUESTOS DE TRABAJO
La futura planta de Zubieta creará 80 puestos de trabajo directos y se calcula que generará otros 100 de forma indirecta. Las empresas adjudicatarias aseguran que cumplirán con las condiciones laborales recogidas en los convenios de Gipuzkoa.