La ciudadanía ante los nuevos retos de la gestión de los residuos
La gestión de residuos está cambiando vertiginosamente en los últimos años y esto es algo que lo podemos ver en nuestro día a día: nuevas fracciones como los residuos orgánicos pasan a ocupar un espacio más en nuestros hogares, mayores demandas para que reciclemos residuos como los RAEEs, etc. Estamos inmersos en un proceso que, lejos de pararse, va a incluir en un corto plazo nuevos retos como la prevención de residuos, objetivos de reciclaje más exigentes o el cambio hacia una economía circular, donde todo se puede reaprovechar una y otra vez. La ciudadanía es una pieza capital del actual sistema y así se expuso en la reciente jornada “Nuevos retos en la comunicación y sensibilización para la gestión de residuos”, organizada por el Gobierno de Navarra, Ecoembes, Ecovidrio y Recyclia a y apoyada por las Mancomunidades de Residuos de Navarra. ¿Estamos preparados para lo que nos viene? Desglosamos varias razones para pensar que sí.
- Los hábitos de reciclaje y la concienciación tiene en la infancia la mejor semilla. “Mejor implantar buenos hábitos que consolidarlos”. Esta frase, apuntada por Carmen Villanueva, del Departamento de Comunicación y Relaciones Externas de la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, pone de manifiesto una de las patas en las que más se apoya cualquier entidad responsable de la gestión de residuos. La educación desde edades tempranas, en cualquier tipo de formato: talleres, proyectos educativos, concursos, intervenciones artísticas, etc. crea no sólo pequeños ciudadanos concienciados, sino prescriptores incontestables. ¿Quién no se siente interpelado cuando su hijo, nieto o sobrino le afea la conducta de derrochar agua o separar incorrectamente un residuo
- Hemos pasado de una sociedad preambiental a una sociedad proambiental. “Los ciudadanos cada vez están más comprometidos”. Esto lo dice Jaime Meléndez Thacker, gerente de marketing de una de las entidades más comprometidas con el reciclaje en nuestro pais: Ecoembes. Esta asociación que gestiona cada año más de 330 campañas de comunicación y sensibilización, mueve a más de 750.000 escolares en sus diferentes programas de educación ambiental: blogs, recursos educativos, colaboración con SEO BIRD, o certámenes escolares y genera más de 3.200 impactos en los medios de comunicación. El compromiso adquirido bien a través de grandes acciones de comunicación o de iniciativas más locales está consiguiendo que cada vez sean más las personas preocupadas por el medio ambiente y conocedoras de las actitudes que se deben seguir para su cuidado.
- La problemática local también tiene su hueco. Los hábitos y costumbres de reciclaje no son iguales en el entorno rural que en el urbano y, por eso, las diferentes organizaciones del sector están poniendo en marcha mecanismos que les permitan comprender mejor los comportamientos locales-rurales para poner en marcha programas más específicos y concretos sobre las ventajas del reciclaje. Igualmente existen todavía nichos de población donde se aprecian actitudes de resistencia al reciclaje. La Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, por ejemplo, tiene en marcha un estudio que precisamente busca conocer los motivos que provocan esas actitudes para buscarles una solución.
- Implicación de la Administración y del resto de agentes implicados. Cuando las administraciones, responsables de los residuos, se muestran partidarias de trabajar de forma conjunta con el resto de agentes implicados, no sólo para poner en marcha nuevas campañas, sino también para trasladar a la sociedad la idea de que la gestión de residuos es un proyecto compartido, el beneficio siempre es más satisfactorio y generalmente permite trabajar en estrategias compartidas a las que se puede dotar de mayor entidad.
- Las nuevas tecnologías y las nuevas formas de contar permiten aproximarse a públicos difíciles de captar por otros medios. Hablamos, como no, de las nuevas posibilidades de comunicarnos que nos ofrecen las redes sociales. La Asociación de Ciencias Ambientales sabe bastante del potencial de las mismas para la educación ambiental en temas como la gestión de residuos. Estas tecnologías son las que permiten además llegar a un grupo de población muy sensible, de 18 a 30 años, al que de otra forma es complicado alcanzar. También son importantes las nuevas formas de contar, desde el punto de vista de la publicidad, que permiten adaptar el mensaje a cualquier medio y dotarle de un componente social que ayuda a conseguir el resto. Borja Martiarena, director de marketing de Ecovidrio, sabe bastante de este tema puesto que la organización en la que trabaja está especializada en buscar y abrir puertas diferentes para trasladar a la ciudadanía el mensaje de que no es suficiente con saber que reciclar es bueno y beneficioso, si no que hay que hacerlo. Las campañas de Ecovidrio se caracterízan por buscar acciones socialmente relevantes o que toquen la responsabilidad social de las empresas y/o organizaciones; por hacer acciones relevantes, deseables, con un planteamiento omnicanal y sobre todo, que se compartan por las redes sociales. De nuevo, el poder de las nuevas tecnologías. Como ejemplo, la campaña promovida por Ecovidrio y el Atlético de Madrid, donde algo tan sentido como un escudo de fútbol se convierte en un mensaje para apoyar el reciclaje. La adhesión a la campaña fue muy importante.
- La sostenibilidad es algo que suena bien y que la ciudadanía tiene interiorizado. Carmen Villanueva resalta la disposición de la ciudadanía ante cualquier solicitud de la administración para introducir nuevas acciones. Según ella, y por su experiencia en la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, no sólo los datos de receptividad son buenos, si no que estos habitualmente se traducen luego en buenos resultados de recogidas de residuos. Según los estudios presentados por Ecoembes, el 98% de los ciudadanos creen que proteger el medio ambiente es importante o muy importante. Con todo, faltaría que el medio ambiente y los medios de comunicación se convirtiesen en compañeros más cómodos que lo que se muestran en la actualidad, bien porque la información medioambiental no ocupa un lugar importante en los medios, bien porque hay residuos como los RAEEs cuya variedad y público implicado en su recuperación es muy amplio y variopinto y por lo tanto necesita mensajes diferentes. Bienvenido León, periodista, Doctor en Ciencias de la información y profesor de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Navarra, apunta como claves para mejorar esta situación entender los medios de comunicación y su funcionamiento, acercar la información y hacerla próxima al ciudadano y facilitar el trabajo de los medios.
El poder de la participación ciudadana. Cuando la ciudadanía se siente escuchada, cuando las acciones se diseñan pensando en sus inquietudes y se les integra en las tomas de decisiones, su respuesta muestra un compromiso sin grietas con el que es más fácil trabajar. Oscar Rubio, Responsable de residuos y medio ambiente de Mancomunidad de Valdizarbe, sabe bien de lo que habla. La Mancomunidad que él dirige, que gestiona los servicios de más de 11.000 habitantes de 12 municipios diferentes, es un paradigma en cuanto a la integración ciudadana en cada una de las acciones de educación ambiental que se diseñan y ejecutan. Un ejemplo que confirma la conocida sugerenci “Piensa globalmente, actúa localmente”.
Las ideas expuestas en este post surgen de la Jornada “Nuevos retos en la comunicación y sensibilización para la gestión de residuos” , organizada por el Gobierno de Navarra, Ecoembes, Ecovidrio y Recyclia y apoyada por las Mancomunidades de Residuos de Navarra, celebrada recientemente en Pamplona.