Los olivos: una fuente vital para la generación de biomasa
De esta forma, la biomasa aprovecha la parte biodegradable de los productos de la agricultura, de la actividad forestal, de la industria y también los residuos vegetales, animales e industriales, además de los procedentes de los residuos sólidos urbanos. Se pueden distinguir dos tipos: la natural, presente en los ecosistemas naturales, y la residual, que procede de diferentes actividades como agrícolas, de jardinería, del biogás de vertederos de residuos sólidos urbanos y de procesos de digestión anaerobia de residuos biodegradables. También se realizan cultivos energéticos con el único propósito de producir biomasa.
Centrados en los tipos que se producen en Andalucía se observa que el más destacable es el procedente del olivar puesto que la producción de aceite genera subproductos con un contenido energético elevado. De este modo, los datos de la Agencia Andaluza de la Energía señalan que en esta Comunidad Autónoma existen 1.400.000 hectáreas de olivar, que suponen en una campaña media una producción de aceite de unas 800.000 toneladas.
Con estas elevadas cifras también son importantes las cantidades de subproducto generado que puede producir energía térmica, eléctrica o incluso bioetanol. Estas materias susceptibles de valoración energética son: orujo, orujillo, hueso de aceituna y poda de olivar. Actualmente existen siete plantas de generación de energía eléctrica con orujillo, con una potencia total instalada de 67 MW, lo que supone una capacidad de consumo de 422.000 toneladas/año. El resto, 262.000 t/año, estarían disponibles para consumo térmico. Además, mañana se inaugurará la primera planta de generación de biocarburantes con esta materia prima, tal y como se anunció en gestoresderesiduos.org
Andalucía cuenta con un importante potencial de biomasa, que supera los 3.447 ktep/año (kilotoneladas equivalentes de petróleo), lo que supone un 19% del total del consumo de energía primaria de la región en 2007. Destaca la procedente del olivar y de la industria oleícola. De este modo, la Comunidad cuenta con quince plantas que suman 164,2 MW, el 44% del total nacional, lo que supone electricidad anual para más de 246.300 viviendas. Utilizan como combustible restos de invernadero, orujo, orujillo y madera. Estas se encuentran: dos en Almería, ocho en Córdoba, una en Huelva, dos en Jaén y dos en Málaga.
A estos cálculos se debe añadir la energía que se consigue mediante las catorce plantas de biogás existentes en la comunidad que proviene de plantas de tratamiento de aguas residuales y desgasificación de vertederos de residuos sólidos urbanos, que aportan otros 18,7 MW. En relación a la generación de energía térmica con biomasa, el consumo de biomasa para usos térmicos durante el año 2008 fue de 613,55 ktep (kilotoneladas equivalentes de petróleo), en su mayoría orujo y hueso.
Via Diario ecologia
Fran Villena (cc)
Andalucía