Madrid tendrá las primeras barreras de seguridad sostenibles del mundo
Las barreras de seguridad vial resultantes del 'New Jersey Project', fabricadas con un porcentaje de caucho y plásticos reutilizados, serán instaladas en un tramo de 400 metros de la M-111 de Madrid, con lo que se convertirán en las primeras sostenibles del mundo.
Así lo ha anunciad el director general de Carreteras de la Comunidad de Madrid, Iván Maestre, que ha destacado el compromiso de la administración regional por “hacer una labor de I+D para obtener nuevos materiales y compaginarlo con la protección del medio ambiente“.
Los estudios de esta iniciativa han demostrado que su fabricación alcanza un nivel de contaminación “más bajo del esperado“, ya que su impacto en emisiones de dióxido de carbono es un 11,5 % más bajo que el de los modelos tradicionales.
Las barreras “New Jersey” incluyen en su composición materiales plásticos, antiguos residuos, lo que permite reducir la cantidad de hormigón empleada y también favorecer el reciclaje de unos componentes que en otro caso tendrían “una menor salida en el mercado“.
Cada una de estas nuevas barreras incluye 33 kilos de caucho reciclado, lo que equivale a seis neumáticos fuera de uso: de esta manera, mejoran la seguridad vial ya que las partículas de este material incrementan la absorción de energía en caso de choque.
La última fase del proyecto, co-financiado por el programa europeo Life+ y que ha contado con un presupuesto de 1,9 millones de euros, consiste en hacer una demostración en condiciones reales para ver “cómo se comportan las barreras a lo largo del tiempo“, ha indicado Maestre.
Economía circular
La prueba se desarrollará en un tramo de 400 metros de recorrido situado en la M-111, al noreste de Madrid, por la que circulan a diario “miles de vehículos“.
Para Jose María Bermejo, director de Desarrollo de Mercados Valorización de Signus Ecovalor, estas barreras son “un ejemplo práctico” de la economía circular por la que quiere apostar la Unión Europea.
En el caso de los neumáticos fuera de uso, la cantidad de residuos desechados “es de tal magnitud que hay que tomar acciones de este tipo para dar un uso a los residuos“.
La Comunidad de Madrid también está trabajando en otros dos proyectos que combinan la construcción de vías de comunicación con la sostenibilidad ambiental: el proyecto APSE sobre pavimentos asfálticos más sostenibles y el proyecto POLYMIX para fabricar mezclas bituminosas modificadas con residuos plásticos.