Pamplona apuesta por una forma muy original de fomentar el reciclaje
Una de ellas es la de echar dinero en una máquina y obtener algo a cambio. Hay máquinas expendedoras de mil tipos de objetos, bebidas, tabaco, juguetes, recargas de móviles, helados, preservativos, bocadillos… faltaba la máquina expendedora de dinero. A cambio solo necesitas depositar en la ranura correspondiente latas y botellas que serán reciclados. Con dinero en el bolsillo y la conciencia ecológica tranquila, la vida te sonríe.
En ciudades como Berlín (Alemania) cadenas de supermecados ofrecen a sus clientes máquinas donde pueden intercambiar botellas de plásticos por tickets que pueden canjear por dinero en las cajas de dichos supermercados.
Entradas de cine a cambio de envases de bebidas. Este singular trueque tiene lugar en las calles de Pamplona, donde se ha instalado una máquina separadora de envases, en la que los pamplonicas pueden comprobar cómo funciona el Sistema de Depósito Devolución y Retorno (SDDR) implantado en 34 países, que promueve para España la asociación Retorna.
La máquina funciona igual que la de cualquier comercio de los países donde existe el SDDR. El consumidor deposita en una embocadura el envase de bebida vacío y la máquina le dispensa un ticket con un punto por cada envase entregado. Cada 90 puntos se pueden canjear por una entrada en los mejores cines de Pamplona. El SDDR real no devuelve puntos, sino los céntimos del depósito que se pagó al comprar la bebida.
Como funciona el sistema retorno:
Al introducir la lata o la botella en alguna de las tres máquinas del supermercado, un sensor identifica el tipo de envase y comprueba que pertenece al sistema alemán de depósito. Si es así, puede ser un recipiente de un solo uso (que ahora hay que reciclar) o de múltiples usos (que habrá que lavar y reutilizar). En el primer caso, al comprarlo el consumidor tuvo que dejar un depósito de 25 céntimos de euro que ahora le será devuelto. La máquina se traga el envase vacío, compacta el material en su interior e imprime un recibo con el reembolso para el cliente. Si se trata de un envase para reutilizar, el montante del depósito es distinto y la botella pasa a un cuarto contiguo donde se va juntando en cajas con otras del mismo tipo.