Residuos de los invernaderos de Almería podrían proporcionar energía a 120.000 hogares
La biomasa generada a partir de los residuos del cultivo de ocho hortalizas en los invernaderos de Almería proporcionaría un millón de megavatios hora anuales; es decir, daría energía, durante un año, a 120.000 hogares. Este es el resultado de la investigación de un grupo de ingenieros de la Universidad de Almería que, además, han creado modelos matemáticos de predicción del poder calorífico de este tipo de biomasa. Sus estimaciones son las primeras hechas en el mundo para estas especies en su conjunto y se acaban de publicar en la revista Renewable and Sustainable Energy Reviews, una de las más importantes sobre energías renovables.
Ángel Jesús Callejón Ferre, investigador principal declara que "Desde la UAL hemos analizado la capacidad calorífica de calabacín, tomate, berenjena, judía, sandía, melón, pimiento y pepino, que constituyen la práctica totalidad del cultivo en los invernaderos. Esta investigación podrá ser utilizada en otros lugares donde se cultive lo mismo como por ejemplo Marruecos o México".
Con el apoyo del laboratorio de biocombustibles de la Escuela Superior de Ingenieros de la Universidad de Sevilla, se han construido 20 ecuaciones de predicción comunes a las 8 especies estudiadas. Las ecuaciones contienen múltiples variables, lo que permitirá hacer aproximaciones más o menos precisas en función de las variables utilizadas en cada ecuación. "Cuantas más variables se incluyan, menos margen de error, claro. Pero en todos los casos son modelos muy precisos", garantiza Ángel Callejón.
Con el análisis, concluyen que, de todas las hortalizas analizadas, "la judía es la que más energía produce por kilo, mientras que el tomate (la más cultivada) es la más difícil de utilizar por su alto contenido en cloro. Esto podría solucionarse haciendo mezclas de residuos de distintos cultivos pero eso exige más estudios e investigaciones".
"Nosotros hemos ofrecido los datos y el potencial. Porque si no se tienen datos no se pueden tomar decisiones. Después tendrán que ser las empresas energéticas las que valoren si es viable su uso o no". De hecho, ya hay algunas empresas que han mostrado interés en el estudio de estos investigadores de Almería.
Ángel Callejón espera en un futuro analizar más tipos de biomasa autóctona de Almería y poder afinar y obtener modelos de predicción específicos de cada cultivo.
Mataparda (cc)