Reutilización de tapones para decorar el exterior de una casa
En un remoto pueblo situado en plena taiga siberiana denominado Kamarchaga. Allí, una mujer llamada Olga Kostina ha convertido su casa de madera en una obra de arte y todo un referente para los recicladores del planeta. Y es que Olga, una pensionista que vive aislada en medio del campo ruso, pasó un buen tiempo recopilando tapones de plástico procedentes de botellas de plástico y cuando vio que tenía suficientes comenzó a recubrir y decorar con ellos el exterior de su hogar.
Por el momento ha reutilizado más de 30.000 tapones, aunque ya ha dejado constancia de que no parará de reutilizar tapones hasta que consiga ornamentar todo el exterior de la casa y de las pequeñas estructuras adyacentes a ella.
Para realizar esos llamativos murales, Olga va clavando los tapones a la pared con clavos y martillo. Los patrones que siguen estas piezas de plástico son de motivos macramés tradicionales, pero entre sus obras también se pueden ver diferentes animales que moran por los bosques vecinos.
Amarillo, Verde y Azul
Agencia Reuters