¿Sabes todo lo que podemos conseguir reciclando aceite?
El poder contaminante del aceite usado puesto en cifras: cada litro cae por el desagüe de casa contamina nada menos que 1.000 litros de agua. Imaginando que cada familia arroja un litro de aceite cada mes y multiplicando… ¿te das cuenta de la cantidad de agua limpia que podemos contaminar si no desterramos un hábito tan perjudicial? Es el momento de ponernos las pilas y cambiar. Porque además, es más mucho fácil de lo que piensas.
Desde 2008, en Fundación Montemadrid se impulsa un proyecto de reciclaje de aceite junto a la Asociación Afanias y el Área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid. No es sólo una iniciativa medioambiental: alcanza también las dimensiones social y educativa. Puedes conocer el proceso viendo el vídeo sobre estas líneas, del programa Aquí la Tierra de RTVE.
El hábito del reciclaje llega a los hogares a través de los niños, que piden a sus familias que guarden el aceite usado para llevarlo después a sus colegios. Las encargadas de recogerlo y prepararlo para la reutilización son personas con discapacidad intelectual del Centro Ocupacional PLEGART-3 de Afanias. El proyecto ya está presente en 65 centros educativos de la comunidad de Madrid, así como en La Casa Encendida; y desde su puesta en marcha ha servido para reciclar decenas de miles de litros de aceite.
La pregunta es… ¿y qué se hace con tantísimo aceite usado? ¿Qué utilidad tiene? Pues funciona a la perfección como biocombustible. En Japón se recogen cada año más de 450.000 toneladas de aceite en hogares y restaurantes. Con el biodiesel obtenido, por ejemplo, pudo iluminarse en invierno toda la ribera del río Meguro, en Tokio. Las bombillas LED instaladas en los cerezos, emulando las flores de este árbol, se alimentaron con electricidad producida de este modo.
Pero la cosa va mucho más allá de la simple decoración: existen aplicaciones prácticas. En China, la aerolínea Hainan Airlines ya ha logrado que un avión con cien pasajeros a bordo volase de Shangai a Pekín empleando aceite reciclado como combustible, combinándolo con fuel convencional. Además del ahorro que supone, con esta práctica las emisiones de dióxido de carbono se reducen entre un 50 y un 80%.
Con el aceite reciclado pueden fabricarse más cosas, como jabones y pinturas. Pero ya ves que tu implicación es importantísima para conseguir el objetivo: ahorro energético y reducción de la contaminación, tanto de nuestra agua como del aire que respiramos.