En declaraciones a la emisora EsRadio, Javier Domínguez Lino, presidente de la Sociedade Galega do Medio Ambiente desde mediados del pasado mes de febrero, reiteró que asume el cargo con ilusión, pero también como un reto a nivel profesional y personal después de haber pasado por el sector de la banca, donde estuvo 15 años, y por la entidad pública Xestur Galicia, centrada en la gestión de suelo industrial. 

Tras un primer diagnóstico de la situación de partida en Sogama, se plantea tres objetivos básicos de trabajo para los próximos meses. 

En primer lugar, reconducir las relaciones con los concellos, afectadas en su momento por la subida del canon, aunque luego pudo ser rebajado a partir de enero del año en curso gracias al menor impacto económico que la reforma estatal del sector energético tuvo,en las cuentas de Sogama. Explicó que, en este contexto, ya mantuvo una reunión con los portavoces de la Fegamp a fin de llegar a puntos de encuentro. 

En segunda instancia, se refirió a la ampliación de la infraestructura industrial de la entidad pública y que, en todo caso, viene a enmarcarse en el Plan Gallego de Gestión de Residuos Urbanos 2010-2020. Aludió así a la recuperación de los envases contenidos en la basura en masa que, junto con la separación del acero, el aluminio y el vidrio, que la compañía ya venía realizando en los últimos años, posibilitará que todo el residuo pueda ser tratado correctamente, minimizando de esta forma el depósito en vertedero. 

En el marco comunitario, recordó que “Europa ya echó una mano a Sogama al principio, mediante la concesión de más de 72 millones de euros procedentes del Fondo de Cohesión, para que ésta pudiese poner en marcha su modelo”, a lo que añadió que, “a pesar del tiempo transcurrido, la entidad sigue siendo hoy todo un referente, tanto a nivel nacional como internacional, así como una de las plantas más eficientes y productivas”. Al respecto consideró que “en el caso de Galicia, se erige como la única alternativa viable, tanto ambiental como económicamente”. 

Si bien algunos concellos se han manifestado a favor del compost industrial, lo cierto es que, tal y como aseguró, “después de 15 años, siguen adscritos a Sogama, por lo que ésta tiene que seguir existiendo para tratar aquella fracción de desechos que no puede ser compostada ni reciclada”. En este sentido, subrayó que reciclaje y valorización energética son procesos plenamente compatibles y complementarios, y que, en todo caso, “las alternativas planteadas a Sogama se plasman más a nivel de papel que en hechos”. 

 Dar continuidad e incluso intensificar las labores de educación ambiental constituye el tercer gran objetivo de Domínguez al frente de Sogama. Puso de relieve los grandes programas formativos y de concienciación que la empresa tiene en vigor, precisando que “toda nuestra estrategia de formación y gestión pasa por las tres erres (reducción, reutilización y reciclaje)”. 

Mencionó así la campaña autonómica “Separemos ben, reciclaremos mellor”, impulsada por la Consellería de Medio Ambiente y en la que colabora Sogama, junto con Ecoembes, Ecovidrio y los sistemas integrados de gestión de pilas (Ecopilas, Ecolec y ERP); el programa de visitas a sus instalaciones, por el que han pasado cerca de 63.000 personas; el proyecto “Recíclate con Sogama”, contemplado en el Plan Proxecta de la Xunta de Galicia y mediante el cual se pretende instaurar la recogida selectiva de residuos en los centros escolares; la campaña de compostaje doméstico, que cuenta con 146 entidades adheridas, de las cuales 96 son ayuntamientos, permitiendo a las familias reciclar en origen la materia orgánica producida en los hogares, conviertiéndola en un abono natural de excelente calidad para ser aplicado en sus huertos y jardines. Con ello se evita que ésta sea depositada en los contenedores verdes convencionales, lo que derivará en un importante ahorro de costes para los entes locales. 

Y en este punto insistió en que “si los concellos incrementan sus tasas de reciclado, recibirán más ingresos por parte de los sistemas integrados de gestión, al tiempo que disminuirán la entrega de basura a Sogama y, por tanto, el importe de lo que deben pagar a esta empresa pública”.