¿Que pasa cuando terminas de beber un café en Starbucks? Lo más probable, a menos que vivas en Seattle o San Francisco, es que esa taza termine en la basura, depositada en un vertedero o incinerada. La mayor parte de los recicladores de papel no aceptan este material debido a la delgada capa plástica de su interior, que dificulta la correcta gestión del residuo.

El gigante cafetero ha fijado la meta de hacer que el 100% de sus vasos sean reutilizables o reciclables para el años 2015, lo que significa que mil millones de tazas de papel se reaprovecharán  anualmente.

Starbucks cree que a los recicladores les puede interesar trabajar con sus envases sin invertir en nuevos procesos. Para probar su teoría, han llevado a cabo recientemente una experiencia piloto de seis semanas durante las cuales recogieron aproximadamente 3.000 kg de vasos usados en 170 cafeterías y otras tiendas minoristas del área metropolitana de Toronto, enviándolos para su reciclaje a una planta en Mississippi, la única fábrica en los Estados Unidos que produce fibra de papel reciclado con una calidad sanitaria suficiente para que pueda ser reutilizado como envase o envoltorio de comidas y bebidas. Posteriormente la empresa International Paper convirtió la fibra en nuevas tazas de café.

El director de impacto ambiental de Starbucks, Jim Hanna, afirmó que el piloto ha demostrado a otras empresas del sector del reciclado de papel que es posible trabajar con sus productos sin necesidad de inversiones nuevas.