Una empresa madrileña es la primera papelera que emplea toda su agua regenerada
Una investigación iniciada por el Grupo de Investigación Celulosa y Papel de la Universidad Complutense de Madrid y continuada por el Canal de Isabel II convierte a Holmen Paper Madrid en referente mundial por ser la primera empresa papelera que utiliza 100% agua regenerada para la fabricación de papel prensa reciclado.
En la grave sequía que afectó a toda la Comunidad de Madrid en 2005 las empresas que empleaban agua potable se alarmaron por la posibilidad de cortes de suministro. Holmen Paper Madrid es la empresa de mayor consumo de agua potable de toda la región y, ante tal desafío, puso en funcionamiento un estudio que evaluara la viabilidad técnica y económica de la posibilidad de utilizar agua regenerada a partir del efluente de una estación depuradora municipal.
Después de una serie de estudios que comenzaron en 2005, y fruto de la colaboración de Holmen con el Grupo de Investigación Celulosa y Papel de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) que dirige la profesora Ángeles Blanco y, posteriormente, con el Canal de Isabel II, lo que antes era una posibilidad es ahora una realidad.
Un estudio exhaustivo de los usos del agua potable en la empresa permitió conocer que el 61% del agua de alimentación se utiliza en los rociadores de la máquina de papel donde se requiere agua de alta calidad para evitar la formación de depósitos. La calidad del agua en este punto es además necesaria pues los rociadores forman aerosoles que entran en contacto con los operarios.
Por tanto, para alcanzar los requisitos de calidad definidos, sobre todo en cuanto a la eliminación de microorganismos patógenos, se decidió estudiar un tratamiento de doble membrana –ultrafiltración y ósmosis inversa– seguido por un proceso de desinfección. De resultar efectivo el tratamiento se podría sustituir el 100% del agua de alimentación a la planta, suponiendo un ahorro de agua potable superior a los cuatro hectómetros cúbicos anuales, cantidad que equivale al consumo en un año de una población de 80.000 habitantes.
El efluente considerado para la regeneración fue el de la estación depuradora de Arroyo Culebro, por su proximidad a la planta. El tratamiento de este efluente constituía un desafío ya que la depuradora trata una mezcla de aguas municipales e industriales cuya composición química es más compleja que en una depuradora de aguas urbanas y podía afectar al funcionamiento de las membranas. Parte de los estudios realizados por la UCM se enmarcaron dentro del Programa PROLIPAPEL de la Comunidad de Madrid y son complementarios a los trabajos realizados para el cierre de los circuitos de agua y la minimización del consumo de agua.
Los estudios de laboratorio previos y los estudios piloto realizados demostraron que el tratamiento de regeneración era viable técnica y económicamente, si bien existe el riesgo de ensuciamiento de las membranas en épocas puntuales que coinciden con fines de semana largos y, por tanto, con limpieza de las instalaciones industriales.
Gracias al convenio suscrito entre Holmen y el Canal de Isabel II la planta de regeneración se ha construido en Arroyo Culebro con una capacidad de 12.400 m3/día, y ha representado una inversión superior a 10 millones de euros que será sufragada por la empresa. Esta actuación se incluye en el Plan Madrid Depura, el cual prevé una inversión de 600 millones de euros para poder obtener 70 hectómetros cúbicos de agua regenerada.
La UCM termina ahora un estudio de los posibles efectos de la sustitución de agua potable por agua regenerada sobre el proceso de fabricación de papel y sobre la calidad del producto final sin encontrar ningún punto crítico hasta el momento, aunque los estudios continuarán hasta finales de año.
Actualmente la empresa ya consume agua regenerada y durante las próximas semanas el consumo aumentará hasta sustituir el 100% del agua potable alimentada a la máquina.
En la grave sequía que afectó a toda la Comunidad de Madrid en 2005 las empresas que empleaban agua potable se alarmaron por la posibilidad de cortes de suministro. Holmen Paper Madrid es la empresa de mayor consumo de agua potable de toda la región y, ante tal desafío, puso en funcionamiento un estudio que evaluara la viabilidad técnica y económica de la posibilidad de utilizar agua regenerada a partir del efluente de una estación depuradora municipal.
Después de una serie de estudios que comenzaron en 2005, y fruto de la colaboración de Holmen con el Grupo de Investigación Celulosa y Papel de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) que dirige la profesora Ángeles Blanco y, posteriormente, con el Canal de Isabel II, lo que antes era una posibilidad es ahora una realidad.
Un estudio exhaustivo de los usos del agua potable en la empresa permitió conocer que el 61% del agua de alimentación se utiliza en los rociadores de la máquina de papel donde se requiere agua de alta calidad para evitar la formación de depósitos. La calidad del agua en este punto es además necesaria pues los rociadores forman aerosoles que entran en contacto con los operarios.
Por tanto, para alcanzar los requisitos de calidad definidos, sobre todo en cuanto a la eliminación de microorganismos patógenos, se decidió estudiar un tratamiento de doble membrana –ultrafiltración y ósmosis inversa– seguido por un proceso de desinfección. De resultar efectivo el tratamiento se podría sustituir el 100% del agua de alimentación a la planta, suponiendo un ahorro de agua potable superior a los cuatro hectómetros cúbicos anuales, cantidad que equivale al consumo en un año de una población de 80.000 habitantes.
El efluente considerado para la regeneración fue el de la estación depuradora de Arroyo Culebro, por su proximidad a la planta. El tratamiento de este efluente constituía un desafío ya que la depuradora trata una mezcla de aguas municipales e industriales cuya composición química es más compleja que en una depuradora de aguas urbanas y podía afectar al funcionamiento de las membranas. Parte de los estudios realizados por la UCM se enmarcaron dentro del Programa PROLIPAPEL de la Comunidad de Madrid y son complementarios a los trabajos realizados para el cierre de los circuitos de agua y la minimización del consumo de agua.
Los estudios de laboratorio previos y los estudios piloto realizados demostraron que el tratamiento de regeneración era viable técnica y económicamente, si bien existe el riesgo de ensuciamiento de las membranas en épocas puntuales que coinciden con fines de semana largos y, por tanto, con limpieza de las instalaciones industriales.
Gracias al convenio suscrito entre Holmen y el Canal de Isabel II la planta de regeneración se ha construido en Arroyo Culebro con una capacidad de 12.400 m3/día, y ha representado una inversión superior a 10 millones de euros que será sufragada por la empresa. Esta actuación se incluye en el Plan Madrid Depura, el cual prevé una inversión de 600 millones de euros para poder obtener 70 hectómetros cúbicos de agua regenerada.
La UCM termina ahora un estudio de los posibles efectos de la sustitución de agua potable por agua regenerada sobre el proceso de fabricación de papel y sobre la calidad del producto final sin encontrar ningún punto crítico hasta el momento, aunque los estudios continuarán hasta finales de año.
Actualmente la empresa ya consume agua regenerada y durante las próximas semanas el consumo aumentará hasta sustituir el 100% del agua potable alimentada a la máquina.
Agencia SINC
Fuenlabrada, Madrid