Canarias: Disminuye la separación de residuos en La Palma, que se queda lejos de los objetivos de recogida

La isla de La Palma se encuentra aún muy lejos de alcanzar los objetivos de separación de residuos para el reciclaje que exige la normativa europea. Así lo ha puesto de manifiesto la consejera insular de Servicios y Cambio Climático, Nieves Rosa Arroyo, quien ha dado a conocer en un comunicado la evolución de los datos de recogida selectiva de los residuos en la isla.
Según los datos aportados por el Consorcio Insular de Servicios, la recogida de residuos de la denominada fracción resto (lo que no se puede reciclar) alcanzó el año pasado las 27.410 toneladas, lo que supuso una reducción de solo un 2% respecto a 2019.
Nieves Rosa Arroyo, explica que, "aunque se han intensificado los esfuerzos a lo largo de todo el año y, en especial, durante la campaña de navidad para que las familias llevasen a cabo una correcta separación de los residuos, no se ha conseguido alcanzar el efecto deseado, pese al estado de pandemia por la COVID-19 en la que nos encontramos".
En los dos primeros meses de la declaración de estado de alarma se refleja una disminución de residuos del 10%, fruto de la reducción de turismo en la isla, mientras que, en el segundo semestre, en los que continúan las restricciones de movilidad, esa disminución se ralentiza y vuelve a incrementarse la recogida de residuos mezclados en contenedor gris.
“Este análisis refleja que la generación de residuos municipales de la fracción resto va en aumento y, por tanto, nos alejamos de nuevo de los objetivos de separación en origen”, manifiesta la consejera. Asimismo, destaca que, pese a la reducción de la actividad turística y de restauración que ha ido unida a la crisis sanitaria, no se ha conseguido avanzar en la reducción de residuos que en un principio se había estimado. Prueba de ello es que la recogida de la fracción resto durante los días clave de las celebraciones navideñas se vio incrementado en un 13%.
En virtud de estos datos, Nieves Rosa Arroyo asegura que en La Palma “todavía se está muy lejos de alcanzar los objetivos de separación del 50% para el reciclaje que exige la normativa europea y que, por tanto, la isla deberá adoptar otro sistema de gestión para alcanzar el modelo que perseguimos”. Por ello, insiste en la necesidad de que los ciudadanos tomen conciencia y lleven a cabo una selección de los residuos en origen, con el fin de que se deposite en el contenedor gris la menor cantidad de restos posible.
[Esta noticia fue publicada originalmente en La Vanguardia. Lee el original aquí]