Cantabria: clausurada una parcela en el Polígono Industrial de La Pesquera para evitar vertidos incontrolados de residuos
El Ayuntamiento de Laredo ha vallado una parcela ubicada en el Polígono Industrial de La Pesquera en la que se realizaban vertidos incontrolados de residuos de manera reiterada. La medida supone "un paso más" en la determinación del Consistorio de perseguir y sancionar este tipo de comportamientos que suponen una "notable agresión medioambiental", al tiempo que implican un importante desembolso a las arcas municipales que supera los 200.000 euros anuales por el traslado y la gestión de dichos residuos al vertedero de Meruelo.
El alcalde, Ángel Vega, y el concejal de Organización, Ramón Arenas, han explicado que esta medida llega meses después de apercibir mediante carteles de las sanciones a que se exponen quienes opten por este tipo de comportamientos incívicos. En concreto, las multas oscilan entre los 900 euros para las infracciones leves y los 300.000 euros a que se elevaría en los casos mal graves, tal y como establece la Ley 22/2011 de Residuos y Suelos Contaminados.
El nuevo cerramiento evitará que se repita una práctica que ya ha dado lugar a distintas denuncias pero, para garantizar su efectividad, el operativo incluye un sistema de videovigilancia que permitirá identificar a los infractores para cursar la pertinente denuncia.
Además, desde mayo del año pasado, agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil patrullan periódicamente para sancionar a quienes actúan al margen de la ley. Los propios datos que maneja el Ayuntamiento señalan que hasta ahora esos vertidos corresponden a obras que en su mayoría se ejecutan fuera del término municipal de Laredo.
Los datos "más concluyentes" los ha aportado la empresa FCC, concesionaria del servicio de retirada de residuos sólidos urbanos, que indican que durante el 2011 se llegó a constatar la salida diaria de dos camiones repletos de residuos desde Laredo hasta el vertedero de Meruelo.
Ello sumaba casi 4.200 toneladas anuales, de las que sólo el 30% correspondía a residuos cuya retirada estaba legalmente gestionada. El resto se imputaba a vertidos incontrolados cuya derivación a la planta de gestión de Meruelo ha venido asumiendo subsidiariamente el Ayuntamiento.
Sólo en transporte, trasladar estos residuos suponía el pago de 50.000 euros anuales. A ellos había que sumar el abono del tratamiento por gestor autorizado, en este caso a la empresa MARE, por un importe de 210.000 euros. Una "cuantiosa factura" que abonan todos los ciudadanos de Laredo con sus impuestos por el comportamiento incívico de personas y empresas que trataban de eludir su responsabilidad con las buenas prácticas medioambientales.
Según FCC, con un control adecuado de las zonas donde aparecen estos vertidos, se estima que esas 4.200 toneladas podrían quedarse en 1.000, con un ahorro de casi 200.000 euros al año. Entre los principales focos, junto a esta parcela en el polígono, se señalan parcelas situadas junto a las pistas de Atletismo, lugar al que también afecta la labor de vigilancia de las patrullas del SEPRONA.
La normativa establece como infracción grave el abandono, vertido o eliminación incontrolada de cualquier tipo de residuos no peligrosos, sin que se haya puesto en peligro grave la salud de las personas o sin que se haya producido un daño o deterioro grave para el medio ambiente, ya que en dicho caso se consideraría infracción muy grave y se agravarían las sanciones.
El Ayuntamiento de Laredo emprendió hace un año una campaña de información que incluyó la colocación de carteles de advertencia sobre la prohibición de este tipo de vertidos. Posteriormente se dio paso a la incoación de expedientes que incluyen, junto a la correspondiente multa, la obligatoriedad de restauración ambiental de la zona afectada. Asimismo, el denunciado debe acreditar que ha realizado la correcta gestión de los residuos irregularmente vertidos.
europapress
Ayuntamiento de Laredo