Coregal: empresa de gestión de residuos
Ramón García, gerente de Coregal, empresa de gestión de residuos perteneciente al grupo Cogami, participó recientemente en el programa de educación ambiental Ecovoz, emitido por la cadena Radio Voz Galicia, para hablar del cometido y particularidades de esta firma, dedicada a la recuperación de desechos en Galicia, fundamentalmente papel/cartón, envases ligeros y otros tales como colchones.
La historia de Coregal se remonta a 1994, momento en el que formaliza un convenio de colaboración con el concello de Santiago de Compostela para la recogida de papel y cartón. Fue entonces cuando inició el camino que la llevaría a crecer y a consolidarse como una compañía de referencia en el sector, contando actualmente con cinco plantas de tratamiento ubicadas en el eje atlántico gallego, manteniendo con ello una política de cercanía a los centros neurálgicos de generación de residuos.
Así, cuatro de ellas se emplazan en la provincia de A Coruña (Santiago de Compostela, Boiro, Ferrol y Carballo) y una en la de Pontevedra (Mos), pudiendo ofrecer de esta forma una respuesta rápida a sus clientes (fundamentalmente empresas y concellos), y, además, a un precio competitivo.
De hecho, recogen el papel/cartón en aproximadamente 60 localidades, recuperando una media de 2.000-2.200 toneladas mensuales, que separan por calidades para venderlo posteriormente.
Lo mismo hacen en el caso de los colchones. Los muelles los venden para chatarra y la espuma la exportan a países asiáticos como Arabia Saudí, donde la utilizan para fabricar parques de juegos infantiles.
PARA RECICLAR, LOS CONCELLOS DEPENDEN DE LOS VECINOS
El portavoz de Coregal entiende que la gestión de los residuos funciona relativamente bien en las empresas, ya que éstas deben ceñirse a unas normas y estándares de calidad, resultándoles más económico separar y valorizar que mezclar toda la basura y depositarla en vertederos, precisando que los concellos, por su parte, dependen del trabajo de los vecinos, para lo cual se necesita mucha educación y conciencia ambiental.
Con una plantilla de 155 trabajadores, Ramón García desveló que la gran mayoría tiene algún tipo de discapacidad (habitualmente de carácter físico) superior al 33 por ciento, por lo que se vieron en la necesidad de adaptar su infraestructura, tanto las naves como los camiones de recogida.
La empresa nació para complementar la formación que Cogami impartía a personas con discapacidad, facilitándoles su primera experiencia laboral, así como un puesto de trabajo digno y estable en el tiempo. Su deseo sería que estos trabajadores se incorporasen progresivamente a la empresa ordinaria, “pero la crisis económica que sufrimos hoy en día no lo permite”. Aún así, no pierde la esperanza. Su objetivo a medio plazo es tener presencia en las cuatro provincias gallegas, continuando con la creación de puestos de trabajo y oportunidades laborales.