El Congreso de la Fundación CEMA congrega a responsables políticos, sindicales y empresarios del sector
El secretario de Estado Medio Ambiente, Federico Ramos, ha afirmado esta semana que los residuos deben gestionarse como recursos, dejando a un lado la idea de que son basura y deben desecharse. Además, ha indicado que la crisis no justifica un retroceso en su gestión.
Las declaraciones se pudieron escuchar en la sesión inaugural del II Congreso Nacional de la Fundación Laboral del Cemento y el Medio Ambiente (CEMA). Ramos ha destacado aquí que el pasado año la valorización de residuos permitió "una reducción de un 12 por ciento en las emisiones de CO2, lo que supone una reducción de más de 752.000 toneladas de CO2 emitidas a la atmósfera".
Por su parte, el presidente de la Fundación CEMA, Juan Béjar, ha subrayado que, sin la valorización energética, el sector cementero tiene "pocas posibilidades de sobrevivir". La valorización en los hornos de las cementeras, según ha apuntado, evita el vertido, elimina las emisiones de metano, que son "20 veces más contaminantes por el efecto invernadero que el CO2", y permite sustituir combustibles fósiles que no son renovables.
También ha señalado que scon ella se incrementa la competitividad y se reducen los costes del sector cementero, frente al "elevado desembolso de dinero público" que supone el tratamiento de residuos en vertedero. "La combinación de la valorización con una tarifa eléctrica previsible es social y medioambientalmente necesaria para la supervivencia de nuestro sector", ha asegurado.
En cuanto al secretario general de MCA-UGT, Manuel Fernández López 'Lito', ha hecho hincapié en que el sindicato echa en falta "una tarifa eléctrica que favorezca a la industria, no solo a la del zinc y el acero, sino también a otros grandes consumidores de energía como es el caso del sector del cemento".
De hecho, ha pedido "un marco energético adecuado" que propicie un aumento del peso de la industria en la composición del PIB para poder hablar de futuro y empleo. "Sin unos costes similares a los de su entorno, nuestra industria no será competitiva y no debemos de olvidar que una fábrica que cierra ya no vuelve a abrir", ha añadido.
Por último, el secretario general de FECOMA-CCOO, Fernando Serrano Pernas, ha puesto de relevancia que el país vive "un momento muy complicado", algo que se acentúa en el sector del cemento por su pérdida de peso en el conjunto de la economía. Por ello, ha abogado por "recuperar el tiempo perdido y desarrollar una verdadera política industrial desde el Gobierno con la participación de todos". "Una política industrial que incluya una política energética que no lastre la competitividad del sector ya que en caso contrario nuestra industria no se podrá recuperar", ha indicado.
Las declaraciones se pudieron escuchar en la sesión inaugural del II Congreso Nacional de la Fundación Laboral del Cemento y el Medio Ambiente (CEMA). Ramos ha destacado aquí que el pasado año la valorización de residuos permitió "una reducción de un 12 por ciento en las emisiones de CO2, lo que supone una reducción de más de 752.000 toneladas de CO2 emitidas a la atmósfera".
Por su parte, el presidente de la Fundación CEMA, Juan Béjar, ha subrayado que, sin la valorización energética, el sector cementero tiene "pocas posibilidades de sobrevivir". La valorización en los hornos de las cementeras, según ha apuntado, evita el vertido, elimina las emisiones de metano, que son "20 veces más contaminantes por el efecto invernadero que el CO2", y permite sustituir combustibles fósiles que no son renovables.
También ha señalado que scon ella se incrementa la competitividad y se reducen los costes del sector cementero, frente al "elevado desembolso de dinero público" que supone el tratamiento de residuos en vertedero. "La combinación de la valorización con una tarifa eléctrica previsible es social y medioambientalmente necesaria para la supervivencia de nuestro sector", ha asegurado.
En cuanto al secretario general de MCA-UGT, Manuel Fernández López 'Lito', ha hecho hincapié en que el sindicato echa en falta "una tarifa eléctrica que favorezca a la industria, no solo a la del zinc y el acero, sino también a otros grandes consumidores de energía como es el caso del sector del cemento".
De hecho, ha pedido "un marco energético adecuado" que propicie un aumento del peso de la industria en la composición del PIB para poder hablar de futuro y empleo. "Sin unos costes similares a los de su entorno, nuestra industria no será competitiva y no debemos de olvidar que una fábrica que cierra ya no vuelve a abrir", ha añadido.
Por último, el secretario general de FECOMA-CCOO, Fernando Serrano Pernas, ha puesto de relevancia que el país vive "un momento muy complicado", algo que se acentúa en el sector del cemento por su pérdida de peso en el conjunto de la economía. Por ello, ha abogado por "recuperar el tiempo perdido y desarrollar una verdadera política industrial desde el Gobierno con la participación de todos". "Una política industrial que incluya una política energética que no lastre la competitividad del sector ya que en caso contrario nuestra industria no se podrá recuperar", ha indicado.
Vía Ecoticias
bambino (cc)
Madrid