El Consorcio de Agua de Gipuzkoa se encargará de la gestión de la estación depuradora de Epele (Gipuzkoa)
El secretario de Estado de Medio Ambiente ha entregado hoy la gestión de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Epele (Guipuzkoa), ejecutada por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) tras una inversión de 33 millones de euros, al Consorcio de Aguas de Gipuzkoa.
Ramos ha destacado “el compromiso del MAGRAMA con la mejora de la calidad de las aguas de nuestros ríos, avanzando en el cumplimiento de la Directiva Europea, y favoreciendo además un desarrollo más sostenible en la zona”que evitará “el vertido directo al río Deba de 2.500 toneladas anuales de residuos”, ha destacado Ramos.
Ramos ha destacado “el compromiso del MAGRAMA con la mejora de la calidad de las aguas de nuestros ríos, avanzando en el cumplimiento de la Directiva Europea, y favoreciendo además un desarrollo más sostenible en la zona”que evitará “el vertido directo al río Deba de 2.500 toneladas anuales de residuos”, ha destacado Ramos.
El Consorcio de Aguas de Gipuzkoa se hará cargo de la explotación integral, el mantenimiento y la conservación de la EDAR, así como la estación de bombeo de Oñati y la conducción de impulsión entre ambas. La estación depuradora de Epele saneará la cuenca alta del río Deba, beneficiando a los municipios de Eskoriatza, Aretxabaleta, Arrasate-Mondragón y Oñati, con una población aproximada de 85.000 habitantes.
El secretario de Estado ha recordado que el río Deba era, hasta hace no mucho, el cauce fluvial más contaminado de la provincia de Gipuzkoa, “por lo que la puesta en marcha de estas instalaciones adquiere especial relevancia”. No en vano, la construcción de la EDAR de Epele junto con la de Apraitz y la de Mekolalde, “gracias al máximo consenso entre todas las administraciones y agentes implicados, ha permitido corregir esta situación”, ha remarcado Ramos.
Federico Ramos ha asegurado que las aguas y los ríos más limpios tienen efectos medioambientales directos en cuanto a la mejora y recuperación de los ecosistemas, “pero también contribuyen al desarrollo económico y social de estas zonas, favorece el acercamiento de los ciudadanos a dichos espacios para su disfrute y la implantación en ellos de actividades más limpias”.
"Un río limpio es sinónimo de bienestar y de calidad medioambiental, y estas actuaciones contribuyen y se integran en nuestro objetivo de trabajar con todos hacia un modelo de crecimiento económico más verde, hacia un desarrollo más sostenible, y hacia la creación de empleo”, ha concluido.
La EDAR de Epele dispone de pretratamiento, tratamiento primario, tratamiento biológico para la eliminación de carbono, nitrógeno y fósforo, y una línea de tratamiento de fangos, con instalaciones de desodorización.
Federico Ramos ha asegurado que las aguas y los ríos más limpios tienen efectos medioambientales directos en cuanto a la mejora y recuperación de los ecosistemas, “pero también contribuyen al desarrollo económico y social de estas zonas, favorece el acercamiento de los ciudadanos a dichos espacios para su disfrute y la implantación en ellos de actividades más limpias”.
"Un río limpio es sinónimo de bienestar y de calidad medioambiental, y estas actuaciones contribuyen y se integran en nuestro objetivo de trabajar con todos hacia un modelo de crecimiento económico más verde, hacia un desarrollo más sostenible, y hacia la creación de empleo”, ha concluido.
La EDAR de Epele dispone de pretratamiento, tratamiento primario, tratamiento biológico para la eliminación de carbono, nitrógeno y fósforo, y una línea de tratamiento de fangos, con instalaciones de desodorización.