Hoy se celebra en Madrid el II Congreso Nacional de la Fundación CEMA
Cerca de un cuarto de la energía consumida por las cementeras españolas se produjo con la incineración de residuos. Así se ha expresado en la inauguración de II Congreso Nacional de la Fundación Laboral del Cementerio y el Medio Ambiente (CEMA).
El Presidente de la Fundación Laboral del Cemento y el Medio Ambiente (CEMA) y de Oficemen, Juan Béjar, ha afirmado que "no hay viabilidad en el sector del cemento sin una valorización al límite". Béjar participó en la apertura de este evento que se realiza bajo el lema "Recuperar residuos como garantía de futuro".
El presidente ha apuntado también que los altos índices de valorización energética de estos países suponen una ventaja competitiva que la industria española no puede dejar pasar, máximo en un momento en el que el sector atraviesa "la peor crisis de su historia".
Se trata, según él, de llegar a una sustitución energética del 80% como hacen otro países de Europa (España en 2011 alcanzó el 20%, superando el 11% del 2009), apuntan desde CEMA y recuerdan que según datos del Eurostat un 60% de los residuos municipales españoles terminan en vertederos. En Alemania, Bélgica o Dinamarca sólo se depositan en vertedero entre el 0.5% y el 6% de los desechos.
La combustión de residuos en los hornos de las fábricas de cemento (valorización energética) permite al sector reducir sus costes energéticos en la producción y ser más competitivos en Europa. El uso como combustible de los deshechos permitió, en 2011, que se sustituyera el 22,4% de la energía fósil consumida por los hornos.
En los últimos años, el sector ha invertido cerca de 400 millones de euros en adecuar sus instalaciones para la recuperación energética (incineración) de residuos.
Hoy en día, el gasto eléctrico de las cementeras supone el 17% de su factura energética, una cifra que se incrementaría entre un 16 y un 18% de aplicarse la reforma energética anunciada por el Gobierno; un cargo inasumible, apunta CEMA, para este sector.
El Presidente de la Fundación Laboral del Cemento y el Medio Ambiente (CEMA) y de Oficemen, Juan Béjar, ha afirmado que "no hay viabilidad en el sector del cemento sin una valorización al límite". Béjar participó en la apertura de este evento que se realiza bajo el lema "Recuperar residuos como garantía de futuro".
El presidente ha apuntado también que los altos índices de valorización energética de estos países suponen una ventaja competitiva que la industria española no puede dejar pasar, máximo en un momento en el que el sector atraviesa "la peor crisis de su historia".
Se trata, según él, de llegar a una sustitución energética del 80% como hacen otro países de Europa (España en 2011 alcanzó el 20%, superando el 11% del 2009), apuntan desde CEMA y recuerdan que según datos del Eurostat un 60% de los residuos municipales españoles terminan en vertederos. En Alemania, Bélgica o Dinamarca sólo se depositan en vertedero entre el 0.5% y el 6% de los desechos.
La combustión de residuos en los hornos de las fábricas de cemento (valorización energética) permite al sector reducir sus costes energéticos en la producción y ser más competitivos en Europa. El uso como combustible de los deshechos permitió, en 2011, que se sustituyera el 22,4% de la energía fósil consumida por los hornos.
En los últimos años, el sector ha invertido cerca de 400 millones de euros en adecuar sus instalaciones para la recuperación energética (incineración) de residuos.
Hoy en día, el gasto eléctrico de las cementeras supone el 17% de su factura energética, una cifra que se incrementaría entre un 16 y un 18% de aplicarse la reforma energética anunciada por el Gobierno; un cargo inasumible, apunta CEMA, para este sector.
Vía EFE
dok1 (cc)
Madrid