Joven inventa un panel solar que funciona con cabello
La melanina es un pigmento natural que se encuentra presente en varias partes de nuestro cuerpo. Es la encargada de dar color a nuestra piel, ojos, cabello y dependiendo de su concentración será más clara u oscura. Lo interesante de la melanina es que es un excelente conductor de electricidad, al menos eso descubrió Malin Karki, un chico nepalés de 18 años que está sustituyendo el silicio de los paneles solares por cabello humano.
El cabello humano es mucho más barato que el silicio y, hasta cierto punto es gratis. Gracias al trabajo de Karki, es probable que estemos frente a una tecnología que sea capaz de romper el gran problema de la energía solar: hacerla asequible para miles de personas.
Karki lleva varios años trabajando en la creación de energía renovable de bajo coste. Inspirado en un libro de Stephen Hawking donde hablaba de las formas de crear estática con el cabello, supo que la melanina era uno de los factores en la conversión de energía.
Junto a sus amigos, Malin Karki inició las pruebas sustituyendo conductores por cabello. Pronto desarrollaron un prototipo de panel con el que pueden cargar un teléfono celular o baterías recargables. El tamaño de los paneles es de 15 cm de lado y producen de 9V a 18W y su producción cuesta sólo 30 euros, aunque si se produjeran en serie, su coste se reduciría a la mitad.
Otra ventaja de este prototipo es que el cabello humano, además de barato es renovable. En Nepal el medio kilo de pelo cuesta aproximadamente 25 centavos de dólar y dura varios meses. Si tú eres el propietario del panel, puedes utilizar tu propio pelo o reciclar el de la peluquería cerca de tu casa.
El invento de Karki podría ser una buena opción para revolucionar la energía solar, ya que incluye materiales que son de fáciles de conseguir, baratos y al alcance de todos.