Hasta ahora conocíamos los puntos limpios, una especie de ”islas ecológicas” más o menos cercanas a nuestros hogares; o los puntos limpios móviles, si se acercan a nuestros barrios para facilitarnos la entrega de residuos especiales del hogar. En estos puntos una persona encargada nos recibe, recoge los residuos y resuelve las dudas que nos surgen sobre objetos que no sabemos dónde tirar. Ahora, ayuntamientos e instituciones están comenzando a implantar una nueva solución que evoluciona en parte estos puntos limpios con las denominadas “casas del reciclaje”.

Las casas de reciclaje se pueden personalizar con diferentes tipos de recogida en función de las necesidades de cada municipio o mancomunidad.

Los ayuntamientos y entidades encargadas de la recogida de residuos no dejan de darle vueltas a nuevas formas para incrementar los ratios de recogida y reciclaje de residuos domésticos especiales. Las demandas de consumidores y asociaciones vecinales para que los puntos limpios estén disponibles durante más tiempo, se coloquen en lugares más accesibles, o permitan depositar un número mayor de residuos, están dando paso a un nuevo tipo de espacios: las casas de reciclaje.

Desde Ekogras, empresa promotora de uno de los modelos de “casa de  reciclaje” que ya se está instalando en muchos municipios –sobre todo del Norte de España–, nos cuentan que esta idea se comienza a gestar en 2010 y como respuesta a la ciudadanía y a la administración en sus demandas de mejora de los servicios de punto móvil limpio. En 2011 colocaron la primera de las “casas” en la Mancomunidad de Valdizarbe, en Navarra, y desde entonces, se ha evolucionado en el diseño de cada contenedor a fin de ofrecer un producto más completo. Para Alfonso Fanjul, director comercial de la marca, las “casas de reciclaje” son un paso más que demuestra la concienciación y el saber hacer de los ciudadanos en cuanto a separación de residuos domésticos.”Uno de los puntos fuertes de los puntos limpios móviles es que el operario enseña al usuario qué se recicla y cómo se recicla. En poblaciones donde ya existe una tradición de punto limpio móvil y ya se sabe qué y cómo reciclar, se puede dar el salto a un punto limpio fijo, sin operario, que además está disponible todo el día para el usuario”.

Además de la ventaja de disponibilidad del servicio, esta nueva fórmula de recogida de residuos es cada vez más aceptada por su menor coste para las administraciones, además de contar con otros beneficios:

Los residuos que se recogen, habitualmente de tamaño pequeño, pueden ir desde pilas, cintas de vídeo, discos compactos, dvd’s o pequeños electrodomésticos, hasta aceide vegetal usado, productos de limpieza o fluorescentes y lámparas de bajo consumo. Todos ellos son recogidos y transportados hasta el lugar indicado por la administración: punto limpio fijo, gestor final, etc. que serán los que en última instancia cierren el proceso de reciclaje de los mismos. Ekogras cuenta en la actualidad con una docena de casas del reciclaje repartidas por diferentes mancomunidades y parece que cada vez más localidades apuestan por este modelo.