Masa de agua marina contaminada con plomo fue hallada en el Océano Atlántico
Diferentes estudios revelan que las concentraciones de plomo son elevadas en el Océano Índico, en el Atlántico norte y en el Pacífico norte.
El océano es inmenso, y en su grandeza esconde miles de secretos, algunos buenos, como que bajo el agua salada podemos encontrar agua dulce, y otros malos, que no son tan secretos. El descuido de la raza humana por su entorno, ha provocado que nuestros mares estén contaminados con plomo.
Una masa de agua marina contaminada con plomo fue hallada a más de 1000 metros de profundidad en el Océano Atlántico. El descubrimiento fue realizado gracias a una inversión de 300 millones de dólares provenientes de colaboraciones internacionales se ha podido documentar la presencia de trazas de metales y otros químicos en los océanos.
El plomo puede causar daños neurológicos y cardiovasculares, además de degradar los convertidores catalíticos de los vehículos, por lo que desde 1970 se ha estado eliminando la gasolina con plomo en todo el mundo. Sin embargo, los 50 años de uso abusivo de este elemento no se pueden borrar tan fácilmente del planeta.
En el mapa se observa que el agua contaminada estuvo alguna vez en la superficie, pero que a lo largo de los años y la dinámica oceánica hundió el plomo, creando una "masa encapsulada de agua contaminada". Sin embargo, las zonas rojas y amarillas, que representan las mayores concentraciones de plomo, son demasiado bajas para representar una amenaza a los seres humanos o a los animales.
Ed Boyle, profesor de geoquímica oceánica en el Departamento de Ciencias Terrestres, Atmosféricas y Planetarias del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), junto con sus investigadores, han descubierto concentraciones altas de plomo en mar abierto, así como cerca de núcleos poblacionales tales como Singapur, y que las concentraciones de plomo son elevadas en el Océano Índico, en el Atlántico norte y en el Pacífico norte.
Cada vez que el ser humano, rompe el equilibro natural, provoca cambios inesperados, que no puede controlar y que poco a poco acaban con el planeta que habitamos