La Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México en conjunto con la delegación Cuauhtémoc, lanzaron un proyecto con el que se buscará recolectar, reciclar y producir biodiésel a partir de aceite vegetal que pueda utilizarse para alimentar los motores de la Red de Transporte de Pasajeros (RTP).

Una de las prácticas más comunes en la cocina es deshacernos del aceite tirándolo por el fregadero. Un solo litro de aceite puede contaminar miles de litros de agua, lo que hace su tratamiento mucho más difícil. La manera correcta de desecharlo es acumularlo en frascos y tirarlos en depósitos de basura especiales o centros de reciclaje.

Por suerte, cuando se recicla, el aceite de cocina puede tener un mejor destino. A partir del aceite vegetal se puede producir biodiésel que sirve como combustible para algunos vehículos. Dada la cantidad que se consume en los hogares mexicanos así como mercados y restaurantes, recolectarlo para producir un combustible alternativo suena como una idea sustentable.

La exsecretaria de Medio Ambiente del Distrito Federal, Claudia Sheinbaum, explicó las pruebas que se llevaron a cabo para comprobar la efectividad de este combustible en los vehículos de transporte público e invitó a la gente a que done el aceite por una mejor calidad de vida en la capital.

Las autoridades esperan que sea posible recolectar de 15 a 20 mil litros de aceite vegetal usado mensualmente. Para conseguirlo se instalarán contenedores en unidades habitacionales, mercados públicos y tianguis de la delegación. De lograrse esta menta, unos 5 mil vehículos podrían operar en el Distrito Federal con este biodiésel.

Si todos los ciudadanos participan, podrían reducirse emisiones contaminantes como bióxido y monóxido de carbono además de partículas suspendidas que afectan gravemente la calidad del aire que se respira en la ciudad causando fuertes enfermedades respiratorias.

Económicamente, la producción por litro de este biodiésel sería 50 centavos más barata utilizando aceite vegetal usado. Son muchos los ahorros que supone la participación ciudadana, donar el aceite que utilizamos no nos costará mucho, pero sí mejorará visiblemente la calidad de nuestro aire y agua. Si vives en de la delegación Cuauhtémoc o cerca de ella, te invito a que seas parte de un cambio positivo en el ambiente.