Nueva planta piloto de biogás a partir de residuos ganaderos en un municipio pontevedrés
Los conselleiros de Economía e Industria, Francisco Conde, y de Medio Rural y del Mar, Rosa Quintana, participaron el martes en la inauguración en la Finca Mouriscade de Lalín de una planta piloto de biogás que permite obtener electricidad y calor a partir de residuos ganaderos, un proyecto impulsado con la colaboración del Centro Tecnológico de Eficiencia y Sostenibilidad Energética (Energylab) y la Diputación de Pontevedra.
En su intervención, Conde destacó que se trata de un proyecto pionero en Galicia, y el primero de España de pequeña escala, adecuado a las características de las explotaciones de la comunidad. Así, la planta servirá de referencia en el sector ganadero gallego por el potencial económico y ambiental de este tipo de energía.
En este sentido, Conde recordó que un importante porcentaje de los ayuntamientos gallegos dependen de las explotaciones lácteas, por lo que cobran especial importancia aquellas medidas capaces de impulsar la modernización e incrementar la rentabilidad de las empresas ganaderas desde el punto de vista del ahorro y la eficiencia energética. “La capacidad de autoabastecimiento resulta fundamental”, explicó, señalando que en Mouriscade la planta de biogás permite el 100% del abastecimiento de energía de la explotación y el 85% de todo el conjunto.
El conselleiro, que destacó que “el impulso de las renovables, la eficiencia y el ahorro son la clave de la planificación de la Xunta de Galicia en materia energética”. La planta está capacitada para generar un ahorro energético de 190.000kw/h anuales, lo que equivale a 6.500 horas de funcionamiento, además de evitar la emisión a la atmósfera de más de 60 toneladas de CO2 por ejercicio, cifra equivalente a la plantación de 4.500 árboles.
Durante el acto, en el que también participaron, entre otros, el presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, y el alcalde de Lalín, Xosé Crespo, Conde resaltó, también, la importancia del proyecto desde el punto de vista de la innovación, que ha permitido la adaptación de tecnología avanzada a las especiales dimensiones de la planta.
Tratamiento respetuoso y eficiente de los recursos ganaderos
En su intervención, Conde destacó que se trata de un proyecto pionero en Galicia, y el primero de España de pequeña escala, adecuado a las características de las explotaciones de la comunidad. Así, la planta servirá de referencia en el sector ganadero gallego por el potencial económico y ambiental de este tipo de energía.
En este sentido, Conde recordó que un importante porcentaje de los ayuntamientos gallegos dependen de las explotaciones lácteas, por lo que cobran especial importancia aquellas medidas capaces de impulsar la modernización e incrementar la rentabilidad de las empresas ganaderas desde el punto de vista del ahorro y la eficiencia energética. “La capacidad de autoabastecimiento resulta fundamental”, explicó, señalando que en Mouriscade la planta de biogás permite el 100% del abastecimiento de energía de la explotación y el 85% de todo el conjunto.
El conselleiro, que destacó que “el impulso de las renovables, la eficiencia y el ahorro son la clave de la planificación de la Xunta de Galicia en materia energética”. La planta está capacitada para generar un ahorro energético de 190.000kw/h anuales, lo que equivale a 6.500 horas de funcionamiento, además de evitar la emisión a la atmósfera de más de 60 toneladas de CO2 por ejercicio, cifra equivalente a la plantación de 4.500 árboles.
Durante el acto, en el que también participaron, entre otros, el presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, y el alcalde de Lalín, Xosé Crespo, Conde resaltó, también, la importancia del proyecto desde el punto de vista de la innovación, que ha permitido la adaptación de tecnología avanzada a las especiales dimensiones de la planta.
Tratamiento respetuoso y eficiente de los recursos ganaderos
Por su parte, la conselleira del Medio Rural y del Mar felicitó a los impulsores de este proyecto, puesto que “nace con una clara vocación medioambiental, para reducir el impacto en la cuenca del Ulla, pero que al mismo tiempo busca una aplicación práctica en las explotaciones ganaderas”.
Así, en el marco de la Estrategia 2020 diseñada por la Unión Europea para reducir las emisiones de CO2, propuestas como esta hacen que se conviertan en un buen ejemplo para el tratamiento respetuoso y eficiente de los recursos ganaderos, puesto que reduce el impacto medioambiental del abono como fertilizante.
Rosa Quintana destacó que la importancia del sector ganadero en Galicia es incuestionable y por eso “estamos comprometidos con el uso adecuado de los purines como recurso para la fertilización de los cultivos y praderas”. La valorizacion de este recurso, añadió, debe hacerse con arreglo a las buenas prácticas agrarias y medio ambientales, minimizando los riesgos que se pudieran generar por usos abusivos o a destiempo.
Vía Xunta de Galicia
Foto de jrubinic (cc)
Lalín, Pontevedra