"Ponte las pilas con tu ciudad" campaña de recolección de pilas en Méjico DF
Cada vez son menos los aparatos que requieren de pilas, pues la tendencia cambiar hacia aquellos que necesitan de baterías recargables, pero ante las pilas que usamos y terminan por dejar de servirnos, al menos unos cuantos preocupados por el medio ambiente, se preguntarán qué hacer con ellas.
Especialmente en Navidad y cuando los niños reciben sus juguetes, la venta, uso y deshecho de pilas se hace más evidente. No sabemos qué hacer con ellas y las tiramos o las acumulamos en nuestro hogar.
Cualquiera de estas dos alternativas son ineficaces para el medio ambiente y nuestra salud, ya que por el tipo de materiales con que están hechas, las pilas no pueden ser mezcladas con los residuos domésticos ya que causan serios problemas de contaminación.
Lo mejor en estos casos es juntar todas las pilas que tengamos en casa y de cualquier tipo (AA, AAA, C, D, CR, cuadradas, de botón y de celular) y poner en marcha uno de los reciclajes más importantes, tanto por su capacidad de ‘transformar’, como por la capacidad de ‘salvar’ a nuestro ambiente.
Esto es lo que sucede con las pilas recicladas:
Se recupera la carcasa de las pilas y se reutiliza en la fabricación de alambre, llaves, mayas, partes para coches, etc.
Se recuperan algunos metales como litio, cadmio, níquel y zinc, que son reutilizados en diversas cadenas productivas.
Lo que no se recupera, se utiliza como estabilizador de residuos peligrosos dentro de la misma planta de la empresa que las recicla.
En la página de la Sedema (Secretaría del Medio Ambiente del Distrito Federal) podrás encontrar el programa "Ponte las pilas con tu ciudad" en donde conocerás la ubicación exacta de estos contenedores o columnas (como las llama la Sedema), según la delegación de la Ciudad de México en la que te encuentres.
Pero para animar tu ímpetu por ayudar al medio ambiente, debes saber que 2012 fue el año en que más toneladas de pilas se recolectaron en el Distrito Federal, con 96.772 toneladas, comparadas con las 16.506 registradas en 2007. No obstante, en 2013 el número alcanzado en 2012 bajó dramáticamente al colocarse en 78.221 toneladas.
Vía Veoverde
Foto de Yellow Cloud (cc)