Se valoriza un residuo obteniendo carbón activo
Con el grave problema de las emisiones de gases de efecto invernadero se han fomentado diversas estrategias de almacenamiento del más abundante de estos gases: el CO2.
El grupo de investigación Tecnologías Ambientales y Recursos Industriales de la Universidad Politécnica de Madrid, ha utilizado un método para la adsorción del CO2 por medio del carbón activo elaborado a partir de lodos de depuradora.
Estas estrategias persiguen un doble objetivo, valorizar los residuos y abaratar, en muchos casos, el coste de la producción del carbón activo, como ocurre en este caso particular.
El carbón activo abarca diversos materiales y se genera normalmente a partir de carbón, cáscara de coco, madera, turba y lignito. Tienen una elevada porosidad, son materiales absorbentes y retienen una gran variedad de sustancias en su superficie.
El mayor interés está en recuperar el componente sin alterar sus propiedades. Concretamente, el grupo de investigación ha conseguido generar carbón activo a partir del lodo tratado previamente con calor sin oxígeno (pirolización) mediante activación química con dos hidróxidos: de potasio o potasa (KOH) y de sodio o sosa (NaOH).
El mayor interés está en recuperar el componente sin alterar sus propiedades. Concretamente, el grupo de investigación ha conseguido generar carbón activo a partir del lodo tratado previamente con calor sin oxígeno (pirolización) mediante activación química con dos hidróxidos: de potasio o potasa (KOH) y de sodio o sosa (NaOH).
El grupo de investigación ha realizado ensayos de pirólisis en atmósfera inerte de nitrógeno bajo distintas temperaturas, para conocer conocer qué factores consiguen mayor porosidad. Una vez obtenido el material pirolizado, se ha llevado a cabo la activación química con soluciones líquidas de KOH y NaOH, así como ambos hidróxidos sólidos, para modificar la superficie y obtener mayor porosidad y con ello, mayor capacidad de adsorción.
La porosidad no es la misma en carbones activos que provienen de lodos que en el carbón convencional, pero la capacidad de adsorción de CO2 ha resultado ser muy similar.
Parte del gas que queda retenido en el carbón activo se debe a la atracción química superficial. La utilización de algunos compuestos químicos como el NaOH en los procesos de activación favorece la generación de centros activos en la superficie del carbón activo donde el CO2 queda adsorbido químicamente.
Vía: ECOticias.com
Pedro Terrades (cc)
Gestores de residuos de Lodos tratamiento