Siete clusters medioambientales europeos trabajan en el aprovechamiento energético de residuos
Los siete clusters medioambientales europeos pertenecientes a la red ICN (International Cleantech Network) participan en el proyecto Coolsweep para fomentar la cooperación entre diferentes regiones. Las entidades que integran esta iniciativa son: Oreec (Noruega), CCC (Dinamarca), LEC (Italia), Aclima (España), Eco World Styria (Austria), Fora (Dinamarca) y RTU (Letonia).
Se busca la creación de un sector líder mundialmente, especializado en el aprovechamiento de los residuos como fuente sostenible de energía y en el uso eficiente de los subproductos generados en su conversión. Así lo ha señalado Mónica Moso, directora general de Aclima, Asociación Cluster de Industrias de Medio Ambiente de Euskadi.
Con este objetivo los clusters participantes se marcan una serie de retos: lograr una masa crítica para competir a escala global; coordinar los esfuerzos en innovación e investigación entre regiones europeas, identificando objetivos comunes, y mejorar las líneas de financiación tanto para la puesta en marcha de nuevas ideas como para la propia actividad de las empresas ya consolidadas.
Asimismo, cuentan con otros retos complementarios como la adecuación de los diferentes marcos normativos y la concienciación ciudadana para que este sector pueda desarrollar todo su potencial.
Así, el proyecto Coolsweep aunará la fortaleza de las regiones participantes para mejorar la competitividad de todo el sector europeo de la valorización energética de residuos. Con ello se busca un salto cualitativo en cuanto a la innovación, la generación de nuevos negocios y el posicionamiento internacional de las pymes del sector. Este trabajo permitirá caminar hacia la estrategia Europa 2020: convertir a la Unión Europea en una economía sostenible y generadora de empleo.
Asimismo, la estrategia Europa 2020 destaca la importancia de la eficiencia en la utilización de los recursos como factor fundamental para hacer frente a estos retos. El uso de los residuos, en todas sus variantes, como fuente de energía, constituye una parte fundamental de dicha estrategia.
Aclima resalta la valorización energética de residuos contribuye a la reducción de emisiones (frente a la disposición final en vertedero) y disminuye la demanda de combustibles fósiles. Por ello, hay una gran oportunidad en nuestro país ya que cerca del 60% de los residuos sólidos urbanos (RSU) acaban siendo depositados en vertederos, causando más del 3% de las emisiones de gases de efecto invernadero del país y derrochando su potencial energético.
Desde distintos estamentos de la UE, también se ha evidenciado que el papel de las regiones va a ser esencial para guiar el cambio hacia un “crecimiento inteligente” y sostenible mediante el respaldo a acciones en los ámbitos del clima, la energía y el medio ambiente.
En este sentido la Red ICN, con sus clusters regionales, resulta un elemento clave para identificar áreas tecnológicas de cooperación que faciliten la especialización inteligente en Europa, estableciendo áreas de cooperación tecnológica entre regiones que permitan concentrar esfuerzos en sectores clave con potencial de crecimiento y generación de nuevos mercados.
Se busca la creación de un sector líder mundialmente, especializado en el aprovechamiento de los residuos como fuente sostenible de energía y en el uso eficiente de los subproductos generados en su conversión. Así lo ha señalado Mónica Moso, directora general de Aclima, Asociación Cluster de Industrias de Medio Ambiente de Euskadi.
Con este objetivo los clusters participantes se marcan una serie de retos: lograr una masa crítica para competir a escala global; coordinar los esfuerzos en innovación e investigación entre regiones europeas, identificando objetivos comunes, y mejorar las líneas de financiación tanto para la puesta en marcha de nuevas ideas como para la propia actividad de las empresas ya consolidadas.
Asimismo, cuentan con otros retos complementarios como la adecuación de los diferentes marcos normativos y la concienciación ciudadana para que este sector pueda desarrollar todo su potencial.
Así, el proyecto Coolsweep aunará la fortaleza de las regiones participantes para mejorar la competitividad de todo el sector europeo de la valorización energética de residuos. Con ello se busca un salto cualitativo en cuanto a la innovación, la generación de nuevos negocios y el posicionamiento internacional de las pymes del sector. Este trabajo permitirá caminar hacia la estrategia Europa 2020: convertir a la Unión Europea en una economía sostenible y generadora de empleo.
Asimismo, la estrategia Europa 2020 destaca la importancia de la eficiencia en la utilización de los recursos como factor fundamental para hacer frente a estos retos. El uso de los residuos, en todas sus variantes, como fuente de energía, constituye una parte fundamental de dicha estrategia.
Aclima resalta la valorización energética de residuos contribuye a la reducción de emisiones (frente a la disposición final en vertedero) y disminuye la demanda de combustibles fósiles. Por ello, hay una gran oportunidad en nuestro país ya que cerca del 60% de los residuos sólidos urbanos (RSU) acaban siendo depositados en vertederos, causando más del 3% de las emisiones de gases de efecto invernadero del país y derrochando su potencial energético.
Desde distintos estamentos de la UE, también se ha evidenciado que el papel de las regiones va a ser esencial para guiar el cambio hacia un “crecimiento inteligente” y sostenible mediante el respaldo a acciones en los ámbitos del clima, la energía y el medio ambiente.
En este sentido la Red ICN, con sus clusters regionales, resulta un elemento clave para identificar áreas tecnológicas de cooperación que faciliten la especialización inteligente en Europa, estableciendo áreas de cooperación tecnológica entre regiones que permitan concentrar esfuerzos en sectores clave con potencial de crecimiento y generación de nuevos mercados.
Uviteco
Copenhague, Dinamarca