Sogama apela por una mayor concienciación de la población de los servicios de gestión de los residuos urbanos
Con motivo de su intervención en la 53 edición de los Cursos de Salud Ambiental celebrada esta semana en Palas de Rei (Lugo), que contó con un aforo de más de medio centenar de asistentes, el presidente de la Sociedade Galega do Medio Ambiente, Luis Lamas, encargado de moderar la mesa redonda de residuos, explicó los pormenores del modelo Sogama desde su dimensión ambiental, económica e industrial, explicando su cometido, objetivos, infraestructura y retos de futuro.
En este sentido, abundó en una de las principales características del sistema por el que ha apostado esta empresa pública: la solidaridad, toda vez que presta el mismo servicio a los 296 municipios adscritos y lo hace, además, en igualdad de condiciones y con idéntico coste, independientemente de la situación geográfica y particularidades de cada localidad.
No obstante, precisó que, a pesar de los esfuerzos que supone, tanto para los concellos como la empresa, dar una gestión adecuada a los desechos conforme a las directrices legales en la materia, este esfuerzo no es valorado por la ciudadanía debido a que no se concibe como un problema, ya que los desperdicios que genera cada día son inmediatamente retirados de las vías públicas y tratados.
Es por ello que apeló a una mayor concienciación de la población como corresponsable de esta gestión y cuyos hábitos y comportamientos derivarán en la mayor o menor producción de basura, la mayor o menor reutilización de los productos y, por supuesto, el mayor o menor reciclado, encargándose Sogama de la recuperación energética de la parte no reciclable.
La entidad, en su condición de servicio público, quiere ir más allá de su actividad puramente industrial y llevar a cabo, tal y como lo está haciendo, un nutrido programa de educación ambiental cuyos destinatarios son todos los colectivos sociales, diseñando para ellos programas y estrategias específicas que respondan a su perfil e intereses. El fin último: que los residuos sean concebidos como recursos.
La gestión de basura tiene un coste
Partiendo de esta premisa, básica y evidente, el máximo responsable de Sogama reconoció que no todos la entienden de esta forma. Tanto es así que todavía hay concellos que no logran cubrir los costes del servicio, y lo peor, que ni siquiera cobran la tasa correspondiente, precisando que ésta no puede ser excedentaria, pero tampoco deficitaria.
A fin de minimizar el gasto, Lamas considera que deben ser revisadas ciertas pautas, en clara alusión, por ejemplo, a las frecuencias de recogida de basura que tenemos actualmente, haciéndose necesario evaluar si, medioambiental y económicamente, son sostenibles.
Llegados a este punto, no esquivó el anuncio de la subida del canon de Sogama, que se hará efectiva el próximo 1 de marzo debido a los recortes impuestos por la actual reforma del sector energético.
Y es que, tal y como explicó, la venta de energía por parte de Sogama constituía una medida imprescindible para minimizar el impacto de dicho canon sobre las economías familiares. La alarmante reducción de ingresos que sufrirá la empresa con el nuevo marco legal, la ha abocado a subir el importe de su otra vía de ingresos, el precio que pagan los ayuntamientos adheridos, concluyendo que Sogama no era, por tanto, el gran negocio que algunos criticaban.