Turismo rural y ODS: una vía hacia la sostenibilidad futura

Este tipo de turismo ha evolucionado hacia una herramienta poderosa para promover los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030, destacándose por su capacidad para equilibrar desarrollo económico, preservación cultural y conservación ambiental.
De acuerdo con datos del Observatorio de Turismo Rural, el turismo rural impulsado en gran parte por la demanda de experiencias auténticas y sostenibles, ha alcanzado un hito de consolidación en 2023, con una penetración del 45% entre los viajeros españoles mayores de 18 años.
Este tipo de turismo ha evolucionado hacia una herramienta poderosa para promover los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030, destacándose por su capacidad para equilibrar desarrollo económico, preservación cultural y conservación ambiental.
La urgencia de apostar por la sostenibilidad en el sector turístico es tal que, por primera vez, la Conferencia de las Partes (COP) sobre cambio climático que realiza la ONU de manera anual, recibió a los ministros de Turismo del G20, ubicando al sector firmemente dentro de la Agenda de Acción de la COP29.
El crecimiento del turismo rural no es sólo una cifra de negocio. Es una oportunidad para avanzar hacia una economía de bajo impacto y alta responsabilidad, tan necesaria en la época en la que vivimos. Este tipo de turismo contribuye directamente a varios de los ODS. Podría mencionar en particular:
- ODS 8, Trabajo Decente y Crecimiento Económico: el turismo rural crea empleos locales y distribuye ingresos en regiones que, a menudo, han sido relegadas. Los alojamientos y experiencias rurales requieren personal de apoyo y servicios, lo que fomenta el desarrollo de pequeños negocios locales y fomenta un crecimiento económico sostenible. Según el Observatorio de Turismo Rural, en el último año, el gasto promedio por persona y día ha aumentado un 4,7%, pasando de 81 euros a 85 euros, demostrando así, el impacto positivo en las economías locales.
- ODS 11, ciudades y comunidades sostenibles: este tipo de turismo, fortalece las comunidades al promover la conservación de la arquitectura y el patrimonio cultural ofreciendo experiencias auténticas que conectan a los viajeros con la cultura local. La posibilidad de realizar varias escapadas rurales durante el año —un 59% de los viajeros ya hacen tres o más escapadas anuales— ayuda a desestacionalizar el turismo y evita la sobreexplotación de los destinos.
- ODS 12, producción y consumo responsables: el modelo del turismo rural en España está promoviendo el consumo local y sostenible, con el uso de productos autóctonos y prácticas responsables en la gestión de recursos. Más del 60% de los alojamientos rurales cuentan con certificaciones sostenibles, como Green Key o la Etiqueta Ecológica Europea (EEE), lo que garantiza que su impacto ambiental se minimice.
En 2023, el 92% de los turistas rurales manifestaron su intención de repetir su experiencia, y muchos planean realizar al menos dos escapadas al año. Este nivel de fidelización es alentador y, a la vez, plantea el desafío de mantener una infraestructura turística que se mantenga fiel a sus valores sostenibles y respete los recursos locales.
La tendencia hacia el turismo slow y de bienestar está alineada con los valores del turismo sostenible, promoviendo un ritmo pausado y un contacto profundo con la naturaleza, ofreciendo un respiro y la oportunidad de reconectar con uno mismo, pero también de reconectar con una realidad más simple, como la que podemos experimentar en el Camino de Santiago.
A medida que el turismo rural crece en popularidad y se convierte en un pilar del turismo nacional, debemos recordar que no se trata solo de visitar un lugar, sino de vivirlo. Esto significa comprometerse con prácticas que fomenten el bienestar de las comunidades, respeten el entorno natural y contribuyan a una economía local justa y resiliente
El turismo rural en España además de ser una oportunidad para descubrir la belleza de nuestro país, también es una plataforma para avanzar en nuestros compromisos con la Agenda 2030 y los ODS. Con cada viaje, podemos elegir formar parte de un cambio positivo y construir juntos una forma de viajar que respete el entorno, las culturas y las comunidades. Como fundador de una agencia de viajes y touroperador especializado en el Camino de Santiago, como Santiago Ways, creo que el turismo rural, cuando se gestiona de forma responsable, tiene el poder de transformar tanto al viajero como al lugar visitado, y esa es la verdadera esencia de un turismo sostenible.
[Este contenido procede de El Español Lee el original aquí]