Entre las alternativas a valorar para el tratamiento de los residuos domésticos y asimilables a partir de ese año está el recrecido hacia arriba del actual vaso de vertido del depósito La Zoreda, en Serín. Otras opciones son la construcción de un nuevo vertedero de residuos no peligrosos en ese área o lejos de ella e incluso el traslado de los desechos fuera de la comunidad autónoma.

El documento deberá estar finalizado en medio año, y tendrá que evaluar los aspectos técnicos y económicos de las alternativas de eliminación propuestas, así como su impacto ambiental y social.

La comisión delegada del consorcio, presidida por la consejera de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, Isabel Marqués, adjudicó ayer la elaboración del plan, que deberá recoger un conjunto de propuestas que sirvan para afrontar la gestión de las alrededor de 680.000 toneladas de residuos no peligrosos que anualmente llegan al depósito controlado del valle de La Zoreda (Gijón).

Tales propuestas de transición deberán resultar eficientes durante un intervalo de 3 a 5 años, es decir, hasta que entren en funcionamiento las instalaciones definitivas que contemple el futuro Plan de Residuos del Principado de Asturias.