En la urbanización Molí Nou de Mutxamel (Valencia), las calles Gabriel Miró y Federico García Lorca se han transformado en auténticos vertederos, donde se acumulan básicamente restos de poda y enseres.

"Hace años limpiaban las calles -aún sin asfaltar- y recortaban los matorrales, pero ahora por aquí no pasa nadie", denunció Ismael Carbonell , residente de Molí Nou y también presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de la localidad (Favum).

El concejal de Mantenimiento, Rafael Pastor, indicó que "los vecinos saben que están convirtiendo su propia urbanización en un vertedero". La ordenanza municipal, señaló, es clara al respecto,  ya que no se permite arrojar resto de podas, enseres o cualquier otro residuo a la calle y animó a los vecinos a que denuncien este tipo de prácticas.

"Hay un  servicio ecoparque que deberían utilizar señaló el ordenanza y los vertederos de Foncalent para las cantidades más grandes de restos de la poda", afirmó

Los vecinos de la urbanización donde viven más de 150 personas mantienen que hace meses que conviven con montañas de resto de poda, colchones y sillas rotas además de bolsas de basura orgánica.

El vecino Ismael Carbonel señaló el riesgo de incendio que supone esa cantidad de hojas secas y reiteró su solicitud de que el Ayuntamiento tome medidas para solucionar esta situación.