ArteSun, es un proyecto financiado por la Comisión Europea y formado por diez empresas comunitarias, entre las que se encuentran dos españolas: la abulense Onyx Solar y el centro tecnológico vasco IK4-Ikerlan. Este proyecto consiste en el desarrollo de células solares orgánicas fotovoltaicas, con un presupuesto superior a los cinco millones de euros hasta 2016. 

Este plan incluye la implementación a escala real de tres prototipos, en el que la entidad de Ávila, Onyx Solar, se encargará de desarrollar un prototipo BIPV (Building Integrated Photovoltaics o energía fotovoltaica integrada en edificios) para probar la tecnología de tercera generación para su aplicación en edificios. Con este fin, la empresa abulense integrará módulos orgánicos en forma de fachada fotovoltaica junto con las dos anteriores generaciones, en sus variantes de silicio cristalino y amorfo, comparando así su forma de actuar.

Participarán en este proyecto, institutos, centros tecnológicos y compañías internacionales de Finlandia, Bélgica, Alemania, Francia y Reino Unido, que se suma a las iniciativas desarrolladas por Onyx Solar, con más planes internacionales como la Universidad Politécnica Mohamed VI (Marruecos); el centro sanitario de Punta Arenas (Chile), que tendrá un muro cortina fotovoltaico con el fin de ser más sostenible y eficiente, o los 33 lucernarios suministrados al aeropuerto de Viracopos, uno de los más grandes de Sudamérica, para un edificio que producirá su propia energía en Sao Paulo (Brasil).