La actividad del vertedero se inició en noviembre de 1996 y ha sido fuente de disputas entre gobierno y oposición local, además de quejas vecinales por los malos olores que en ocasiones llegan al casco urbano, que está situado a tan solo dos kilómetros en línea recta.

Durante estos quince años la instalación situada en la partida de Upanel ha sido el destino de diversas clases de desechos de origen urbano e industrial, cuya explotación se ha articulado en torno a diversos vasos destinados a recibir residuos sólidos urbanos, residuos industriales no peligrosos, animales muertos y desechos de construcción y demolición.

En el año 2000 la polémica generada alrededor del vertedero se debía a la llegada de 45.000 toneladas de basura externa a Aspe, aprobada por el pleno de la Mancomunidad y, en el año 2007, se generó a raíz de 95.000 toneladas procedentes de diversos puntos de la Comunidad. Los vasos disponibles se han ido progresivamente colmatando y desde 2009 se van sellando de forma progresiva.

De todos modoso, será a partir del próximo mes de septiembre cuando comience a desplegarse la totalidad de las obras de clausura, que precisarán una inversión de más de 1,5 millones de euros. El Ayuntamiento indica que, con esta actuación, se adecuarán topográficamente todos los vasos de vertido mediante la ejecución de los correspondientes movimientos de tierra; la disposición de las capas de arcilla compactada, láminas de impermeabilización y capas de drenaje de aguas y gases; la revegetación de la zona y la sustitución de la actual balsa de almacenamiento de lixiviados por otra que tendrá más del doble de capacidad.

La responsable del municipio indicó que con estas actuaciones se avanza en el tratamiento de residuos "ya que a los residuos sólidos urbanos que producimos se les da un tratamiento de valorización en la planta de Elche, y el resto de residuos domiciliarios tienen el recientemente inaugurado ecoparque para su aprovechamiento y reutilización."