La empresa compostelana de valorización de residuos y miembro de la Asociación Profesional de Empresas Medioambientales de Galicia (APROEMA), Tratamientos Ecológicos del Noroeste (TEN), es la única representante de Galicia de entre los 49 beneficiarios de la segunda convocatoria de los Proyectos Clima promovidos por el Fondo de Carbono FES-CO2 –entidad perteneciente al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA)– con los que se pretende contribuir a la reducción de emisiones de CO2 en los llamados sectores difusos (agricultura, transporte, residencial y residuos).

TEN es una de las cinco empresas seleccionadas en el apartado de residuos, con un proyecto basado en el uso de biomasa forestal en una instalación MHT (Mechanical Heat Treatment) de tratamiento de residuos sólidos urbanos. “A diferencia de otros proyectos, nosotros no tuvimos que realizar ningún trabajo de sustitución de gas natural por combustible renovable porque desde el principio hemos utilizado una caldera de biomasa. En total, hemos evitado 3.000 toneladas al año de emisiones de gases de efecto invernadero”, explicó hoy desde Madrid el director de esta compañía, Xosé Quiroga, a la salida del acto de firma de los proyectos, presidido por el titular del MAGRAMA, Miguel Arias Cañete.

No obstante, Quiroga expresó su “sorpresa” al saberse la única propuesta de Galicia que ha sido beneficiada, dada la “gran capacidad de producción de biomasa” que tiene la zona, unos 4,7 millones de toneladas. “No me parece normal”, afirmó. Ante esta aparente falta de representación, el miembro de APROEMA apuntó a la propia complejidad de este tipo de convocatorias públicas como posible causa que dificulta la adhesión y selección de más empresas: “El trabajo de redacción no es fácil, si bien es cierto que hay que perderle el miedo a este tipo de convocatorias nacionales. Además, cuentas con el apoyo del MAGRAMA que te orienta y te asesora desde el minuto cero ya que están tan implicados como el promotor en llevar a buen puerto el proyecto presentado”.

Por ello, y en referencia a la proposición no de ley presentada ayer por el PP en el Congreso para trazar una hoja ruta de reducción de emisiones de CO2 en los sectores difusos, pidió que se favoreciera “un ambiente propicio” para las empresas que quieran verificar sus reducciones a través de iniciativas como el Proyecto Clima. “Es una cuestión que podría encajar dentro de esa hoja de ruta”, sugirió.

El FES-CO2 adquirirá las reducciones verificadas de los 49 proyectos a través de un contrato de compraventa. Si en la convocatoria de 2012 se fijaron como objetivo 800.000 toneladas de CO2 a reducir en los próximos cuatro años, ahora se prevé un descenso de más de un millón de toneladas en el mismo período.

Con respecto a la situación del consumo de biomasa forestal en Galicia, Quiroga recalcó la necesidad de potenciar la venta y uso de este recurso tanto en la propia comunidad autónoma como en el resto de España frente a las exportaciones a países como Holanda, Reino Unido e Italia. “Allí tienen un panorama más claro en cuanto a emisiones y, por tanto, se benefician de la biomasa para controlar sus niveles”, comentó a la vez que recordaba la imposibilidad de llevar a cabo una promoción efectiva del uso de la biomasa por parte de la Administración sin contar primero con una base de usuarios sólida.

En este sentido, calificó de “positivos” los pasos que ha dado el Gobierno en materia medioambiental ya que, en su opinión, al dar prioridad al mercado doméstico de las emisiones frente a los terceros países, se potencia la generación de empleo.