Bajo el lema "we’re all about feeling good whilst we eat" ("nos sentimos bien mientras comemos") la compañía operará en una atmósfera bio-sostenible envasando los alimentos en cajas respetuosas con el medio ambiente. La idea del negocio es que una vez pasado el tiempo legal que tiene un alimento para ser vendido, éstos se manden a Too Good to Go para ponerse a disposición de los clientes de la aplicación. Su precio es de 2 a 3.80 libras por comida y parte de los beneficios van destinados al restaurante donante. 

Los empresarios ya han puesto en marcha la aplicación en lugares como Brighton, Leeds, Birmingham y Manchester, mientras que en Londres tendremos que esperar al mes que viene para poderla utilizar. Son 95 restaurantes los que se han adscrito a la idea por el momento, la mayoría negocios independientes ya que es muy difícil que las grandes cadenas entren en este negocio, a pesar de ser las que más alimentos desaprovechan.

La empresa se financia principalmente a través de becas universitarias y pretende resolver el problema de gestión de residuos en el mundo de la industria alimenticia.

Actualmente, desperdiciamos casi el 40% de todos los alimentos que producimos en todo el mundo, 1.300 millones de toneladas de comida que van a la basura cada año. En algunos países, como Estados Unidos, esta realidad está muy generalizada y el gesto de tirar comida está más extendido de lo que se debería, convirtiéndose en este modo en el país que más basura genera a nivel mundial.

Reino Unido es el séptimo país en esta lista derrochando 560 kilogramos de alimentos por cada persona cada año, por detrás de Estados Unidos (760 kg. por persona al año), Australia (690 kg. por persona al año), Dinamarca (660 kg. por persona al año), Noruega (620 kg. por persona al año), Holanda (610 kg. por persona al año) y Alemania (540 kg. por persona al año). En España desperdiciamos 163 kg. de comida por persona.